Preparación del material
El trenzado se utiliza con bastante frecuencia en la vida cotidiana; se suelen trenzar los cabellos, y hasta existen trenzas de pan. Sin embargo, desde el punto de vista artesanal, y más precisamente, dentro de nuestras tradiciones, cuando se habla de trenzado enseguida se piensa en los tientos, o finas tiras de cuero crudo.
De eso se tratará aquí, aunque para comenzar no estará demás la experiencia adquirida trenzando otro tipo de materiales. Después de todo, las trenzas que se hacen en el pelo requieren la misma técnica utilizada para hacer la trenza de tres, que será la primera de este curso. Para practicar pueden usarse hilos de cáñamo encerados de grosor suficiente como para poder manipularlos con comodidad.
Los tientos pueden prepararse con cueros de vacuno, caballo, cabra, etc. dependiendo del uso que se les vaya a dar. El cuero no debe recibir ningún tratamiento de curtido, ni siquiera haber sido salado. Existen diversos procedimientos para prepararlo, pero básicamente debe lavarse lo mejor posible y luego se estaquea en bastidor estirándolo bien, y se deja a la sombra hasta que se seque. Para quitar el pelo también existen varios métodos. Algunos lo ponen en una lechada de cal apagada durante tres días o más, hasta que los pelos salen fácilmente. La cal suele endurecer mucho los cueros de vacuno, así que se ponen las lonjas en agua durante tres días o más, cuidando de que no comience la putrefacción, y el pelo se quita restregándolo sobre una tabla con un taco de madera. También se limpia del otro lado, para quitar todo resto de grasa o membranas que hubiesen quedado del cuereado.
El cuero puede teñirse con decocciones de sustancias vegetales como el quebracho u otras maderas con poder tintóreo. Para blanquearlos se colocan en agua oxigenada común, de 10 volúmenes, durante 4 días o más. Luego se vuelven a estaquear para estirarlos y se dejan secar a la sombra.
Cortar los tientos es de por sí todo un arte. Aunque vienen herramientas especiales que permiten cortarlos de un ancho uniforme, hay quienes armados solamente de un cuchillo bien afilado son capaces de cortar a pulso tientos muy delgados y parejos.
La mayor parte de lo que se expone en este curso se ha extractado del libro de Mario López Osornio "Trenzas gauchas", aunque para facilitar la interpretación del texto he modificado algunos párrafos para darle más claridad. En poco más de una docena de lecciones aprenderá a realizar diversos tipos de trenzas, botones, costuras y nudos que pueden servir para hacer elementos útiles y decorativos, como cintos, mallas de reloj, llaveros, etc. Se trata entonces de un curso elemental, como para introducirse en esta artesanía. En caso de querer ampliar sus conocimientos puede recurrir al libro de López Osornio, que es mucho más extenso de lo que se expone aquí.
Siguiente: Trenza de tres